en Nuñomoral cojo el desvío hacia el Gasco. Las mujeres están lavando en el río Hurdano las tripas para la matanza. Cerca del pueblo hay un merendero con vistas a Cerezal y al río que hace un recorrido típico de la zona.
No sé si es la roca la que tortura al agua, o el agua la que tortura a la roca, pero estos ríos en sus inicios se ven sometidos a curvas y contracurvas, meandros, acuchillamiento por las rocas del cauce,...
Bonitos pueblos colgados en los precipicios, con algún remanente de lo que fueron Las Hurdes tiempo ha. Estas fotos son de La Fragosa.
En el Gasco, podemos visitar el poblado antiguo, el chorro de la Meancera, el "Volcán", y los aledaños. Primero me dirijo al Chorro de la Meancera. Camino cuidado, bien señalado y una ruta corta con poca dificultad porque lo han acondicionado con mucho esmero. El "volcán" queda para otra ocasión. La cascada no es tan espectacular como otras de la zona, pero el paseo es agradable.
El el pueblo un artesano fabrica "casitas".
El poblado antiguo tiene el encanto de lo sencillo, de lo intrincado, de lo natural
Por uno de los caminos del pueblo me adentro porque el valle parece chulo. Terrazas y riachuelos.
Por 9 € se puede comer en el pueblo. El problema, como en muchos de estos lugares es la saturación de vehículos, que a veces no deja un sólo sitio donde aparcar. Pero es un problema con el que hay que contar.
Hasta luego.
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